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Chihuahua, Chihuahua.- La organización Voluntarias Vicentinas de Chihuahua A.C. los chihuahuenses a través del programa de redondeo «Peso por Peso» de Alsuper, A.C. y la Fundación del Empresariado Chihuahuense, A.C. coinvirtieron más de 2.2 millones de pesos en el equipamiento del comedor «Santa Luisa», ubicado en la colonia Tarahumara, en beneficio de 50 familias indígenas, así como en la construcción de un centro de apoyo en el desarrollo de tareas escolares para más de 80 niños, con el objetivo de promover la mejora tanto de la calidad educativa como de vida de los beneficiarios, implementando servicios con programas de nutrición, salud, educación y relaciones humanas.
Las obras fueron inauguradas en un evento realizado en las renovadas instalaciones del comedor, contando con la asistencia de la Sra. Rosana Wisbrun Terrazas, Presidenta de Voluntarias Vicentinas de Chihuahua, A.C. quien fue acompañada por la Sra. Guillermina Vergara Macip, Presidenta Nacional de Voluntarias Vicentinas, A.C.; el Lic. Alejandro Vargas Almanza, Coordinador de Responsabilidad Social de Fundación Alsuper, A.C. y la Sra. Ana Portilla de Cano, Consejera de Fechac en la región de Chihuahua.
En su intervención, la Sra. Ana Portilla de Cano, Consejera de Fechac en la región de Chihuahua, reconoció el trabajo realizado por Voluntarias Vicentinas de Chihuahua A.C. en la creación, fomento y promoción de la solidaridad comunal en la protección, ayuda y educación de chihuahuenses que viven en estado de vulnerabilidad.
«Fechac y las Voluntarias Vicentinas hemos trabajado juntos durante más de 9 años, construyendo una gran alianza que ha beneficiado a miles de chihuahuenses; en esta ocasión, invirtiendo juntos en este edificio que funcionará como comedor y salón para capacitación y desarrollo», agregó.
Por último, la Consejera de Fechac destacó la importancia de la suma de esfuerzos en la transformación social de Chihuahua y reconoció el compromiso de instituciones, como Alsuper y Voluntarias Vicentinas de Chihuahua A.C. que en esta ocasión, sumaron sus recursos y multiplicaron la inversión social realizada en beneficio de familias indígenas, brindándoles mediante esta alianza, más y mejores oportunidades de desarrollo humano y social.
Todos los proyectos impulsados por Fechac son posibles gracias a un modelo de responsabilidad social compartida que suma los esfuerzos de los empresarios chihuahuenses, quienes aportan recursos económicos y el trabajo voluntario de 130 consejeros provenientes de organismos empresariales; el Gobierno del estado, que recauda solidariamente las aportaciones a través de su secretaría de Hacienda; el Congreso del Estado, que emite un decreto que permite este mecanismo; y las organizaciones de la sociedad civil, que coinvierten con la Fundación y operan proyectos enfocados en formar una mejor comunidad.
