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Integrantes de la Sexagésima Sexta Legislatura del Congreso local, solicitaron revisar la convocatoria, así como el instrumento de evaluación que se dirige a médicos generales mexicanos y extranjeros que estén interesados en ingresar al Sistema Nacional de Residencias Médicas, para realizar un curso universitario de especialización médica en el sistema Nacional de Salud, a fin de aumentar la matrícula de aceptados.
Este Punto de Acuerdo de urgente resolución, fue presentado por el diputado Benjamín Carrera Chávez de MORENA, en voz de su compañero, Miguel Ángel Colunga Martínez, quien detalló que este exhorto se dirige a los titulares del Ejecutivo Federal, a través de la Secretaría de Salud, de la Secretaría de Educación Pública y de la Comisión Interinstitucional para la Formación de Recursos Humanos para la Salud.
Dentro de la exposición de motivos, dijo que el Examen Nacional para Aspirantes a Residencias Médicas, es un instrumento de medición de conocimientos en el contexto del ejercicio de la medicina general, objetivo y consensuado, que constituye la primera etapa del proceso para ingresar al Sistema Nacional de Residencias Médicas y que dentro de este sistema, se integran 27 especialidades.
“Decenas de miles de egresados son rechazados cada año para especializarse en hospitales; más de 40 mil médicos se presentarán en el mes de noviembre a un examen que puede cambiar sus vidas para siempre y la diferencia entre aprobar o no, implica poder estudiar una especialidad médica y aspirar a la promesa laboral de una exitosa carrera”, determinó el legislador.
Mencionó que ocho de cada diez sustentantes son rechazados, mismos que dijo que reprueban por las carencias formativas del sistema de salud en México, por lo que se debe de mejorar el mismo.
“Estamos en un país que acusa la falta de doctores y de recursos para atender a la población, y al mismo tiempo, le cierra las puertas a miles de egresados que en la mayoría de los casos, abandonan al país en busca de oportunidades dado a que los empleos son precarios, o se estrellan una y otra vez con el Examen Nacional de Aspirantes a Residencias Médicas, hasta pasarlo”, afirmó.
Reiteró que en esta crisis de salud provocada por el COVID-19, se necesitan más y mejores médicos, que no se sesgue el derecho a la educación, que los médicos acudan a los hospitales a cursar su residencia médica y aseguró que lo antes señalado, es un asunto de seguridad nacional y de interés público.
Por otro lado, expresó que el examen, se presenta como un proceso «equitativo y transparente» de selección, pero la lógica meritocrática, choca con la realidad de puntos de partida desiguales en la población.
“Se ofrecen al paralelo cursos especializados, que oscilan entre los 20 mil y 50 mil pesos, y tomar la decisión de intentarlo en el extranjero tampoco es una opción al alcance de todos los bolsillos. También hay dudas sobre el diseño del examen, que tiene 450 reactivos y se desarrolla en una jornada maratónica de ocho horas seguidas, la subjetividad en el grado de dificultad y los ajustes estadísticos necesarios para que sea equitativo”, finalizó.
