La era Trump: Una guerra comercial ha comenzado

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Dr. Sergio Villalba

Aún no se cumple un mes de la toma de posesión de la presidencia del cuadragésimo quinto presidente de los Estados Unidos de Norte América, Donald J. Trump, la incertidumbre en el ambiente es mayor aún, todas las propuestas de y amenazas de campaña las ha cumplido casi de forma inmediata; la construcción del muro en la frontera con México, una propuesta más demagógica que efectiva, dentro de su soberanía son libres de construir todo lo que gusten, lo que es absurdo es que pretenda que los mexicanos paguen por una obra que es aberrante. Una pregunta que me hizo llegar un lector hace poco fue: ¿Puede obligarnos a pagar por el muro? La respuesta es contundente, no, no puede; en primera porque viola nuestra soberanía nacional, aún y pese a todas las amenazas que ha lanzado a través de Twitter; amenazas que son berrinches ante la frustración de ver que su promesa de campaña no será cumplida (al menos como el la planteo).
Inicialmente, su vocero mencionó que se impondría un arancel del 35% a los productos mexicanos, está medida es incoherente y explico porque, si llegase a pasar los que pagarían sería su mercado interno, los ciudadanos norteamericanos, no los mexicanos, incluso los mexicanos que ocasionalmente consumimos bienes en el vecino país tampoco pagaremos, porque por derecho declaramos un manifiesto donde nos regresan la parte correspondiente al impuesto (VAT); además, dicha propuesta violaría los acuerdos del Tratado del Libre Comercio de América del Norte (NAFTA), que aún y cuando Trump ha dicho que abandonará dicho acuerdo, no es tan fácil, aún debe de ser aprobado por el congreso; ahora, en el caso de que Estados Unidos abandone el NAFTA, tampoco puede poner aranceles de manera arbitraria, pues debe regirse por las normas de la Organización Mundial de Comercio (OMC). Otro argumento para obligar a los mexicanos a pagar el muro es el tasar un impuesto del 2% sobre las remesas; ¿puede hacerlo? Sí, pero el efecto sería momentáneo, si se abre una cuenta en HSBC que tiene bancos en ambos países, o bancos filiales BBVA con BBVA Compass, o Santander con Bank of America, se deposita en una cuenta de Estados Unidos y se retira en México con una tarjeta Visa adicional para la misma cuenta; si deciden gravar las operaciones a Visa directamente sería muy difícil detectar que es remesa y que no, además, México ya amenazó con gravar las utilidades de las empresas extranjeras en el país para compensar el impuesto a las remesas.
Otro punto a tratar, son los boicots convocados por redes sociales y que han comenzado a meter presión en las ciudades fronterizas de El Paso, Eagle Pass y Mc Allen, donde las ventas de los comercios se han visto afectadas; dentro del mismo boicot se promovió dejar de consumir productos de marcas extranjeras, de las cuales resalta Starbucks, Domino’s y Coca Cola, hay que aclarar que Starbucks Inc. Dio la concesión a Alsea S.A.B de C.V (empresa mexicana) para operar su marca; Alsea es también operadora de las marcas, PF Chiang, Itallianis, Burguer King y Domino’s entre otras, en el caso de Coca Cola, es operada por Fomento económico mexicano, mejor conocido como FEMSA, también mexicana; el lector es libre de elegir y es bueno que consuma los productos locales, pero al dejar de consumir ciertos productos extranjeros, también afectamos a mexicanos.
Es cierto que Estados Unidos tiene una balanza comercial negativa con México, China y Alemania, pero imponer aranceles no es una solución, un escenario que cada vez toma más fuerza es una guerra de divisas encabezada por China y Estados Unidos, ambos países amenazan con depreciar sus divisas, si el dólar comienza a depreciarse es muy probable que el superávit en la balanza comercial que tenemos con Estados Unidos desaparezca; además, ante tal incertidumbre en el mercado los inversionistas cubrirán su riesgo resguardándose en los metales, el petróleo y la divisas fuertes; esto dejaría muy desprotegido al peso mexicano; todo esto puede generar una reacción en cadena, con peso depreciado frente al dólar, más el aumento en precios del petróleo nos lleva al escenario de un alza en los combustibles inminente, lo cual elevaría las expectativas de la tasa de inflación y obligaría a Banco de México a subir la tasa de interés.
Tal cuál mencionó Agustín Carstens, Donald Trump es un huracán que amenaza la economía mexicana, aunque esto puede desembocar en una crisis financiera de escala global y más aguda que la de 2008.
Una luz en todo esto es que veo muy probable que el presidente de los Estados Unidos cumpla su mandato en forma, lleva menos de un mes y ya ha violado la ley de manera recurrente; impuso un veto migratorio atacando a los musulmanes dentro y fuera de Estados Unidos, esto transgrede la primer enmienda la cual hace referencia a la libertad de culto; Nordstrom, decidió sacar de su catálogo la ropa ofrecida por Ivanka Trump, lo cual ocasionó la molestia del mandatario, haciendo declaraciones y amenazas a la tienda departamental, para empeorar la situación la miembro de su gabinete Kellyanne Conway invitaba al público a comprar la línea de ropa de Ivanka, algo no ético y claramente existe un conflicto de interés, y para rematar parte del pentágono y otros servicios federales estarán rentando pisos dentro de la Torre Trump, y si, todo este caos en menos de un mes, es por ello que veo muy probable que el mandatario sea destituido en el transcurso de este 2017.

Para sus dudas y comentarios quedo a la orden en mi correo electrónico sergio.villalba@uacj.mx

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