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Un 14 de julio de 1631, dio inicio la amplia y diversa historia del entonces llamado “Real de Minas de San José del Parral”, luego de haberse descubierto una veta de metales preciosos por el Alférez Real, Don Juan Rangel de Biezma.
El festejo de tan singular fecha para los oriundos de estas tierras, resulta de suma importancia y habrá de quedar enmarcado dentro de las ya tradicionales “Jornadas Villistas 2017” que cuentan un amplio programa de eventos a realizarse entre el 12 y 23 de julio.
El hoy Hidalgo del Parral, Chihuahua, se constituye como una de las comunidades más antiguas del Estado de Chihuahua, luego de Santa Bárbara y Valle de Allende, comunidades agrupadas en esta región sur del Estado, limítrofe con el Estado de Durango y cuna del orgullo chihuahuense.
Por espacio de 96 años, San José del Parral, se constituyó como la “Capital de la Nueva Vizcaya” durante la dominación Española, y posteriormente en la transformación nacional fue testigo de la lucha de Independencia y recibió al Presidente de la República, Don Benito Juárez García en 1864, para posteriormente convertirse en escenario de la Revolución Mexicana en 1910.
A lo largo de estos 386 años el carácter de los habitantes de la región de Parral, que no se puede entender de otra manera, ha sido puesta a prueba y siempre ha logrado salir adelante, como lo muestra la post revolución, y muy especialmente los duros golpes de la naturaleza en las múltiples inundaciones presentes desde los siglos XVIII, XIX y XX, siendo la más graves por los decesos y daños, la ocurrida el 8 de septiembre de 1944.
De dicha tragedia se forjó un gran espíritu de unidad entre los nacidos en Parral y su región, para poner de pie las ruinas dejadas por el devastador poder de las agua del antiguo río “San Gregorio” hoy río Parral, y levantar el ánimo ante el duro golpe; lo que posteriormente dio origen al lema “Sobre todo la fe” plasmada en el escudo de armas de la ciudad.
Nobleza obliga, por lo que también se debe destacar el espíritu filantrópico de integrantes de las diferentes generaciones de benefactores, destacando entre ellos el acaudalado minero, Don Pedro Alvarado, y Don Federico Stallforth, este último de origen alemán, habiendo ambos aportado fuertes sumas para el desarrollo de su querido Parral.
Espacio falta, para hacer justicia a los grandes hombres y mujeres de trabajo que por más de tres siglos han fincado en el amor a su tierra, uno de los más grandes orgullos a pregonar por el mundo, el orgullo de ser del meritito Chihuahua, del Mineral del Parral.
Un hombre nacido en el rancho “la Coyotado”, de San Juan del Río, Durango, puso de muestra su cariño por Parral, en la época de la lucha armada de 1910, siendo este el famoso General de la División del Norte, Francisco Villa, quien encontró en Parral su hogar, para posteriormente, el 20 de julio de 1923, perder la vida en una emboscada.
Precisamente la historia de quien nació bajo el nombre de “Doroteo Arango” y que adoptó el de “Francisco Villa”, da origen a las llamadas “Jornadas Villistas” que por más de 20 años han captado la atención de propios y extraños, que desean conocer de cerca la vida y obra del mexicano más famoso en el Mundo “Pancho Villa”.
Ven y atestigua la hospitalidad de los parralenses, así como el gran espectáculo del arribo de centenares de jinetes de la “Gran Cabalgata Villista”, las escenificaciones del asesinato del Jefe Máximo de la famosa “División del Norte”, su sepelio y sepultura en el Panteón de “Dolores”, todo ello entre el 12 y 23 de julio, sumando espectáculos de gran entretenimiento, preparados por la Administración Independiente del Alcalde, Alfredo Lozoya Santillán.
