Una Sociedad Civil Organizada

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Por

Erik Jurado

Pensamos con regularidad que la estructura de gobierno que hemos logrado erigir con el tiempo representa el signo inescrutable de una sociedad organizada. Nos parece que somos sociedad cuando tenemos una estructura que guía y cuida el cumplimiento, creación y ejecución de las normas. Creo que en cierto grado eso es atinado, pero no del todo. El gobierno es una manifestación de organización y creo que en esta etapa del desarrollo humano es sólo una muy básica. Aunque la certidumbre que ostentaron las sociedades con la consecución de gobiernos civiles sostenidos por una carta magna representó en su tiempo un gran logro frente a los gobiernos absolutos e inestables, hoy por hoy el grado de exigencia debe migrar más arriba.

Hoy los grandes retos en términos sociales es conseguir no sólo la pulcritud de los procesos democráticos, transparencia, participación y cumplimiento de la ley. El reto hoy día está mucho más arriba y es conseguir la participación organizada de la sociedad civil. Esa participación ciudadana que queda fuera de las obligaciones de gobierno, esa participación que vigila no sólo por el interés personal sino por el social como un mecanismo de avance y no como una forma de extracción de recursos de alguien más.

Desde esa perspectiva en lo local nos hemos retrasado. El nivel de participación de la ciudadanía de forma activa en el país es inferior al de otras regiones, pero en lo Estatal y municipal la organización ciudadana en casi inexistente.

Es ese un reto mayor, debemos comenzar a descentralizar el poder político y a conformar equipos de trabajo dirigidos a necesidades sociales y políticas. Ahí está la clave para la limpia política, esa de la que tanto nos quejamos y esperamos se resuelva sola o por la aparición de una especie de santo. La clave en la resolución de los problemas de las personas y su organización está precisamente en eso, en la organización.

En la medida que grupos de personas dedican su tiempo a la resolución de problemas de forma más especializada aumentan el nivel de exigencia a los gobiernos y autoridades para el manejo de los recursos púbicos y su aplicación.

Si vemos el futuro con una visión de presente, lo que nos toca a las generaciones actuales es gestar un movimiento social que aliente a la organización especializada y sistemática de la sociedad que hasta hoy se ha comportado erráticamente, esta organización debe darse en varios niveles y bajo el abordaje de múltiples problemas.

Ese es precisamente nuestro reto, es la tarea que le sigue a lo que han conseguido ya nuestros predecesores.